Hoy 25 de noviembre, nos reunimos para reflexionar sobre las causas y consecuencias de un gran problema que nos invade: la violencia CONTRA LAS MUJERES, y, sobre todo, para recordar a las mujeres que se nos han ido, a quienes un día un infame agresor les sesgó, cruelmente, la vida.
También para ofrecer nuestro apoyo moral a las familias de las víctimas, que han sufrido, sufren y seguirán sufriendo sin remedio. No nos vale la fórmula de decir que la violencia es tan antigua como el ser humano. Nonos conformamos con una sociedad patriarcal y machista que ejerce su fuerza contra la mujer indiscriminadamente, porque son cada vez más el número de mujeres y sus retoños quienes las sufren. ¿Qué está ocurriendo en nuestra sociedad?¿Cómo parar este espiral de violencia? Contra esta forma de violencia que reflejan una estructura de poder desequilibrada, donde las relaciones entre los sexos no son igualitarias, hay que levantar la voz y gritara los cuatro vientos que la VIOLENCIA, la violencia de cualquier tipo, es un atentado contra el derecho a la vida, a la seguridad, a la dignidad, a la integridad física y psíquica de la víctima, y a la LIBERTAD.Y QUEREMOS DECIR:
- PRIMERO. ¡BASTA YA! a una sociedad cómplice de esas muertes, que podemos calificar de «terrorismo doméstico».
- SEGUNDO. BASTA a la ligereza de muchos jueces y juezas que dictan sentencias injustas
- TERCERO. Sobre todo, basta ya, a los agresores, a los violadores, a los maltratadores.
- CUARTO. Declaramos que hombres y mujeres somos libres, y, por tanto, se debe dar el principio de igualdad de oportunidades para los diferentes sexos en todos los ámbitos de la sociedad.
- QUINTO. Queremos y debemos ser educados en un lenguaje no discriminatorio, con materiales no discriminatorios.
- SEXTO. Reclamamos un lenguaje no sexista.
- SÉPTIMO. Denunciamos el machismo en cualquier forma de relación.
- OCTAVO. Reivindicamos una educación igualitaria para ambos sexos.
- NOVENO. Que se aplique la Ley Integral contra la Violencia de Género.
- DÉCIMO. Que no se tenga miedo a denunciar en caso de ser agredidas o agredidos.
Hoy, desde el IES San Juan de Dios, los alumnos/as junto a educadores y educadoras, queremos cambiar la sociedad, nos comprometemos a ello, y consideramos que recibir una educación igualitaria es una buena forma y principio para conseguir los cambios sociales deseados y encontrar nuevas relaciones entre los géneros más eficaces, integradoras y solidarias.
No hablar del símbolo más brutal de la desigualdad existente en nuestra sociedad, será la garantía total del cambio